Add parallel Print Page Options

Si se encuentra la copa en poder de alguno de nosotros, que muera el que la tenga, y el resto de nosotros seremos esclavos de mi señor.

10 ―Está bien —respondió el mayordomo—, se hará como vosotros decís, pero solo el que tenga la copa en su poder será mi esclavo; el resto de vosotros quedará libre de todo cargo.

11 En seguida cada uno de ellos bajó al suelo su bolsa y la abrió.

Read full chapter